Características socioeconómicas y culturales de las familias campesinas del valle del Mantaro, entre 1975 y 2015

Socio-economic and cultural characteristics of the peasant families from Mantaro Valley between 1975 and 2015

 

Filoter Tello Yance[1]

Mauro Rafaele de la Cruz[2]

 

 

 

RECIBIDO: JUNIO 27 2017

ACEPTADO: NOVIEMBRE 9 2017

 

 

 

Resumen

La presente investigación surgió para responder al problema: ¿cuáles son las características socioeconómicas y culturales de las familias campesinas del valle del Mantaro en 1975, y luego de la transferencia e innovación tecnológica agropecuaria, en 2015? El objetivo fue comparar las características socioeconómicas y culturales de las familias campesinas del valle del Mantaro en 1975, y luego de la transferencia e innovación tecnológica agropecuaria, en 2015. Se planteó la siguiente hipótesis: las características socioeconómicas y culturales de las familias campesinas del valle del Mantaro en 1975, y luego de la transferencia e innovación tecnológica agropecuaria, en 2015, muestra cambios significativos en las condiciones socioeconómicas, crianza de animales, cultivos y patrones culturales. En el desarrollo del trabajo de investigación se utilizó el método científico, nivel de investigación descriptiva, con un diseño descriptivo comparativo. La población estuvo constituida por 73357 productores jefes de familia del valle del Mantaro (cuatro provincias y 76 distritos), beneficiarios de la transferencia e innovación tecnológica agropecuaria del sector estatal y privado y/o mediante sus propios recursos. La técnica fue la encuesta, y el instrumento, el cuestionario. En el análisis estadístico de los datos obtenidos, se utilizó la prueba de chi cuadrado para la homogeneidad de las muestras comparando los porcentajes de 1975 y 2015, al 95% de confianza estadística.

Palabras clave: transferencia tecnológica, innovación agropecuaria, patrones culturales.

 

Abstract

The present investigation arose to answer the problem: what are the socio-economic and cultural characteristics of the peasant families from Mantaro valley in 1975, and after the agricultural technological transfer and innovation, in 2015? The objective was to compare the socio-economic and cultural characteristics of the peasant families from Mantaro valley in 1975, and after the agricultural technological transfer and innovation, in 2015. The following hypothesis was put forward: the socio–economic and cultural characteristics of the peasant families from Mantaro valley in 1975, and after agricultural technology transfer and innovation, in 2015, show significant changes in socio–economic conditions, animal husbandry, crops and cultural patterns. In the development of the research work, it was used the scientific method, descriptive research level, with a descriptive comparative design. The population was constituted by 73 357 producers who are heads of familiy from Mantaro valley (four provinces and 76 districts), beneficiaries of the agricultural technological transfer and innovation from the state and private sector and/or through their own resources. The technique was the survey, and the instrument, the questionnaire. In the statistical analysis of the data obtained, the chi–squared test was used for the homogeneity of the samples, comparing the percentages from 1975 and 2015, at a 95% of statistical confidence.

Keywords: technology transfer, agricultural innovation, cultural patterns.

 

 

Introducción

El presente trabajo refleja determinadas motivaciones, como la necesidad de describir las características socioeconómicas y culturales de las familias campesinas del valle del Mantaro del año 2015, en comparación con el año 1975, de manera retrospectiva. Las familias de características de una economía natural, autárquica, de autosubsistencia “independiente” de la influencia del mercado capitalista, de un proceso autónomo del desarrollo de sus patrones culturales, productivos, de alimentación, vestimenta, mentalidades, al incorporarse gradualmente al mercado capitalista, se convierten en dependientes de tecnologías productivas, de alimentos, vestido de origen capitalista. De hecho, se evidencia la estructuración de características socioeconómicas y culturales diferenciadas entre las familias de un tiempo a otro.

La tecnología moderna, adoptada solo por las familias más pudientes de las comunidades campesinas del valle del Mantaro, ha modificado significativamente las condiciones socioeconómicas y culturales de las comunidades, ya que los campesinos pobres siguen con la tecnología ancestral o tradicional, generando de esta manera la desigualdad en la estructura social de las unidades familiares, que se expresa en las condiciones socioeconómicas y culturales. Es importante dar a conocer que la penetración de tecnologías propias de la racionalidad capitalista, a través de paquetes tecnológicos a cargo de organismos gubernamentales y privados como las ONG de desarrollo rural en un contexto socioeconómico, cultural, así como en un espacio y entorno ecológico específico propio de los Andes, ha creado una profunda desigualdad socioeconómica, dependencia tecnológica y deterioro del medio ambiente en forma irreversible.

La baja o alta productividad y rentabilidad de la producción agropecuaria no se reduce única y exclusivamente a la innovación o modernización tecnológica, depende también de muchos factores e indicadores, como la cantidad y calidad de tierras agrícolas, los factores agroclimáticos, las fechas de siembra, el manejo adecuado de labores culturales durante el ciclo agrícola, la infraestructura de riego, las herramientas, los equipos agrícolas, las semillas mejoradas, el crédito agrícola, la asistencia técnica, el apoyo financiero, los medios de transporte, la topografía de los suelos (planos o pendientes), la estructura del mercado, la disponibilidad de la mano de obra, la presencia de plagas y enfermedades, los factores socioeconómicos y culturales del agricultor en las distintas unidades agrícolas, los sistemas de producción y modelos de organización productiva, las políticas macroeconómicas de los gobiernos de turno; es decir, es un enfoque sistémico que refleja la realidad como totalidad y sus elementos interactuantes como parte del todo.

Entre los estudios que aportan a la investigación, podemos mencionar a Figueroa y Cotlear (citados por Kevin, 1987). Ellos han constatado que la tecnología moderna (uso de pesticidas, fertilizantes, variedades híbridas y mecanización) es el factor determinante de los incrementos productivos; sin embargo, Agreda (1987) ha hecho notar que el tipo de tecnología moderna que se encuentra en uso entre los campesinos de la sierra no siempre produce rendimientos económicos reales por tratarse de técnicas que requieren de altos costos de producción, además, existen limitaciones de carácter ecológico para la difusión de tales técnicas.

En el valle del Mantaro, la pequeña agricultura está en proceso de capitalización e innovación de las tecnologías productivas agropecuarias, y constituye el principal aporte de la seguridad alimentaria de la ciudad de Huancayo y del mercado de Lima por la cercanía.

Las innovaciones científicas y tecnológicas a cargo de organismos internacionales como el Centro Internacional de la Papa (CIP), a fin de conducir investigación para mejorar la papa como alimento básico y mantener el germoplasma, la transferencia de paquetes tecnológicos, la asistencia técnica a cargo de las ONG de desarrollo y la asistencia técnica a cargo del Estado a través del Ministerios Agricultura, lograron introducir tecnologías productivas en las actividades agropecuarias mediante campos demostrativos en las comunidades campesinas y, como consecuencia, modificaron patrones culturales del ciclo agropecuario.

 

 

Materiales y métodos

a.   Participantes: La muestra del presente estudio estuvo constituida por 401 familias campesinas del valle del Mantaro, determinada y seleccionada en el entorno del muestreo aleatorio simple con N = 73357 familias, 0.5 de probabilidad de éxito, 95 % de confianza estadística, 5% de error y 5% de pérdidas por mortalidad experimental. Esta muestra fue determinada en el año 2015, y a las familias seleccionadas se les preguntó acerca de las características socioeconómicas y culturales en los años 2015 y 1975, en forma retrospectiva.

b.   Perfil de la muestra

Tabla 1

Distribución de la población y muestra (agricultores) por margen, zona agroecológica, provincia, distrito y tamaño del distrito

Distrito

Provincia

Margen

Zona

UA

Tamaño

Muestra

Ahuac

Chupaca

Derecha

Intermedia

  2221

Grande

  59

Apata

Jauja

Izquierda

Baja

  1514

Grande

  40

Sicaya

Huancayo

Derecha

Baja

  1273

Grande

  34

Sincos

Jauja

Derecha

Baja

  1194

Grande

  32

Pucará

Huancayo

Izquierda

Baja

    975

Mediano

  26

San Juan

Chupaca

Derecha

Alta

    896

Mediano

  24

Orcotuna

Concepción

Derecha

Baja

    813

Mediano

  22

Masma

Jauja

Izquierda

Intermedia

    768

Mediano

  20

San Jerónimo

Huancayo

Izquierda

Baja

    703

Mediano

  19

Muqui

Jauja

Derecha

Baja

    681

Mediano

  18

Nueve de Julio

Concepción

Izquierda

Baja

    667

Mediano

  18

Sausa

Jauja

Izquierda

Baja

    551

Mediano

  14

San Agustín

Huancayo

Izquierda

Baja

    428

Pequeño

  11

Ataura

Jauja

Izquierda

Baja

    423

Pequeño

  11

Santa Rosa

Concepción

Izquierda

Baja

    399

Pequeño

  10

Huaripampa

Jauja

Derecha

Baja

    358

Pequeño

    9

Chilca

Huancayo

Izquierda

Baja

    356

Pequeño

    9

Janjaillo

Jauja

Izquierda

Alta

    342

Pequeño

    9

Marco

Jauja

Izquierda

Intermedia

    298

Pequeño

    8

Pilcomayo

Huancayo

Derecha

Baja

    287

Pequeño

    8

Total

 

 

 

 

15147

 

401

UA: Unidades agropecuarias

 

c.          Materiales: En el proceso del desarrollo de la investigación, se utilizaron como materiales informes de evaluación de balance de impacto tecnológico de los promotores de campo de algunas ONG y de extensionistas del Ministerio de Agricultura; también se utilizaron encuestas.

d.          Método: Se utilizó como método general el método científico, tipo básico, nivel descriptivo, no experimental, de enfoque cuantitativo.

e.          Instrumentos: En el desarrollo de la investigación, se utilizó el cuestionario.

f.           Procedimiento: En el análisis estadístico de los datos obtenidos, se utilizó la prueba de chi cuadrado para la homogeneidad de las muestras comparando los porcentajes de 1975 y 2015, al 95% de confianza estadística.

Resultados

Cambios socioeconómicos

En la tabla 2 se observa que el acceso laboral de las familias campesinas en 1975 era solo de un 45%, mientras que en 2015 fue de 72%. La prueba de chi cuadrado revela diferencias estadísticamente significativas entre los porcentajes de los períodos comparados. Ese resultado evidencia, por tanto, un incremento significativo en el acceso laboral después de las capacitaciones en tecnologías productivas.

Tabla 2

Acceso laboral de las familias campesinas antes (1975)

y después (2015) de capacitación tecnológica

 

 

Acceso

laboral

1975

2015

Familias

%

Familias

%

No

220

55

112

28

181

45

289

72

2cal = 59,950; GL = 1; 2teo = 3,841; Valor P = 0

 

 

En la tabla 3 se observa que en 1975, la mayoría de las familias campesinas no tenían acceso al crédito (80%). En 2015, la mayoría de las familias (55%) ya tenía acceso. La prueba de chi cuadrado apuntó diferencias estadísticamente significativas entre porcentajes de los dos períodos analizados.

 

 

Tabla 3

Acceso al crédito de las familias campesinas

en 1975 y en 2015

 

Acceso

1975

2015

Familias

%

Familias

%

No

321

80

200

45

Si

80

20

221

55

2cal = 107,194; GL = 1; 2teo = 3,841; Valor P = 0

 

 

En la tabla 4 se observa que, en un intervalo de 40 años, el porcentaje de familias campesinas con ingresos bajos pasó de un mayoritario 67% al 40%. La prueba de chi cuadrado mostró diferencias estadísticamente significativas entre los porcentajes de los períodos comparados. Estos resultados evidencian incrementos significativos en el nivel de ingreso económico de las familias del valle del Mantaro en 2015.

 

Tabla 4

Nivel de ingreso económico de las familias campesinas

en 1975 y en 2015

 

Acceso

1975

2015

Familias

%

Familias

%

Bajo

270

67

161

40

Medio

121

30

200

50

Alto

10

3

40

10

2cal = 65,008; GL = 2; 2teo = 5,991; Valor P = 0

 

 

Junto con el mayor nivel de ingreso, se observó mayor posesión de tierras cultivadas. Así, en 1975, el 30% de las familias tenían más de una hectárea de tierra cultivada, mientras que, en 2015, el 65% de las familias poseen más de 3 hectáreas (tabla 5). La prueba de chi cuadrado reveló diferencias significativas entre los porcentajes de los períodos analizados.

 

Tabla 5

Posesión de tierras cultivadas de las familias campesinas

en 1975 y en 2015

 

Extensión

(ha)

1975

2015

Familias

%

Familias

%

Menos de 1

281

70

140

35

1 a 3

100

25

200

50

Más de 3

20

5

61

15

2cal = 101,310; GL = 2; 2teo = 5,991; Valor P = 0

 

 

En la tabla 6 se evidencia el grado de productividad de las familias. En 1975, un 35% de las familias tenía baja productividad; cuarenta años después, este porcentaje se redujo al 24%. Y la alta productividad aumentó de 40% a 46%. La prueba de chi cuadrado mostró diferencias de porcentajes estadísticamente significativas.

 

 

Tabla 6

Productividad de las familias campesinas en 1975 y en 2015

 

Productividad

1975

2015

Familias

%

Familias

%

Baja

140

35

97

24

Media

100

25

119

30

Alta

161

40

185

46

2cal = 11,115; GL = 2; 2teo = 5,991; Valor P = 0,004

 

Cambios en la crianza de animales

En la tabla 7 se observa que en 1975, la mayoría de las familias campesinas criaban animales mayores (vacuno, ovino, porcino y equino) y menores (aves y cuyes), tanto criollos como mejorados. En la actualidad, se observa una ligera disminución de crianza de animales criollos (con excepción de porcinos y equinos), en cuanto ha aumentado la de animales mejorados. La prueba de chi cuadrado mostró diferencias significativas de porcentajes entre los períodos estudiados en lo que se refiere a crianza de ganado vacuno y ovino de las familias campesinas del valle del Mantaro. No se encontraron diferencias en el destino de la producción pecuaria de los años 1975 y 2015. La mayoría de la producción se destinaba a la venta local y regional.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Tabla 7

Crianza de animales de las familias campesinas en 1975 y en 2015

 

Especie

1975

2015

2cal

Valor P

Criollo

%

Mejorado

%

Criollo

%

Mejorado

%

Vacuno

221

55

180

45

192

48

209

52

  4,198

0,040

Ovino

253

63

148

37

188

47

213

53

21,284

0,000

Porcino

281

70

120

30

277

69

124

31

  0,094

0,759

Equino

321

80

  80

20

321

80

  80

20

  0,000

1,000

Aves

233

58

168

42

221

55

180

45

  0,731

0,393

Cuyes

249

62

152

38

233

58

168

42

  1,331

0,249

GL = 1; 2teo = 3,841

 

 

En la tabla 8 se evidencia que antes del cambio tecnológico, el destino de los productos agrícolas eran predominantemente el autoconsumo de la unidad familiar, fluctuando entre 62% (papa) y 90% (otras: linaza, oca y mashua). En 2015, esa situación ha variado, y la agricultura de autosubsistencia se ha transformado en una agricultura comercial, concordante con la demanda de los productos de mayor consumo en la ciudad, tales como el maíz (60%), papa (70%), haba (55%) y arveja (58%). Las diferencias de porcentajes entre los períodos estudiados son estadísticamente significativas.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Tabla 8

Destino de la producción agrícola de las familias campesinas en 1975 y en 2015

 

Especie

1975

2015

2cal

Valor P

Autoc

%

Venta

%

Autoc

%

Venta

%

Maíz

253

63

148

37

160

40

241

60

43,176

0

Papa

249

62

152

38

120

30

281

70

83,529

0

Haba

281

70

120

30

180

45

221

55

52,043

0

Arveja

273

68

128

32

168

42

233

58

55,540

0

Olluco

321

80

  80

20

261

65

140

35

22,549

0

Otras

361

90

  40

10

281

70

120

30

49,969

0

Autoc = Autoconsumo; GL = 1; 2teo = 3,841

 

En la tabla 9 se aprecia que, en 1975, la mayoría de las familias campesinas alimentaba a sus animales con pastos naturales de la comunidad campesina y de sus propias parcelas (70%); solamente el 30% utilizaba alimentos provenientes de la industria. En 2015, la mayoría de los ganaderos utilizó alimentos de origen industrial. Por otro lado, en 1975, la mayoría de las familias campesinas trataba las enfermedades de sus animales de modo tradicional usando plantas medicinales (72%). En 2015, la mayoría de las familias utilizaba productos veterinarios, tanto nacionales como importados. Las diferencias de porcentajes entre los períodos estudiados son estadísticamente significativas.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Tabla 9

Formas de crianza de animales de las familias campesinas en 1975 y en 2015

 

Dimensión

1975

2015

2cal

Valor P

Trad

%

Mod

%

Trad

%

Mod

%

Alimentación

280

70

121

30

142

35

259

65

  92,244

0

Sanidad animal

290

72

111

28

123

31

278

69

139,222

0

Trad = Tradicional, Mod = Moderno; GL = 1; 2teo = 3,841

 

En la tabla 10 se observa que el mejoramiento genético pecuario alcanzaba solo al 30% de las familias campesinas en 1975, mientras que en 2015 bordea el 60%. Las diferencias de porcentajes entre los períodos analizados son estadísticamente significativas.

 

Tabla 10

Mejoramiento genético pecuario de las familias campesinas

en 1975 y en 2015

 

Mejoramiento genético

1975

2015

Familias

%

Familias

%

No

281

70

160

40

120

30

241

60

2cal = 73,756; GL = 1; 2teo = 3,841; Valor P = 0

 

 

Cambios en los cultivos

En la tabla 11 se observa que en 1975, el mejoramiento de semillas de las familias campesinas alcanzaba el 55% de ellas, mientras que en 2015 bordea el 75%. Las diferencias de porcentajes entre los períodos analizados son estadísticamente significativas.

 

 

 

Tabla 11

Mejoramiento genético de semillas de las familias campesinas

en 1975 y en 2015

 

Mejoramiento genético

1975

2015

Familias

%

Familias

%

No

180

45

100

25

221

55

301

75

2cal = 35,118; GL = 1; 2teo = 3,841; Valor P = 0

 

 

En la tabla 12 se observa que, en 1975, la mayoría de las familias realizaba labores culturales como el barbecho, la siembra, el sistema de abonamiento, el control fitosanitario, la cosecha, la selección y el almacenamiento, utilizando conocimientos tradicionales transmitidos de padres a hijos. En 2015, todas esas actividades han pasado a utilizar herramientas tecnológicas (p. ej. tractor, productos agroquímicos para el control fitosanitario). Las diferencias de porcentajes entre los períodos analizados son estadísticamente significativas.

 

Tabla 12

Labores culturales agrícolas de las familias campesinas en 1975 y en 2015

 

Labor cultural

1975

2015

2cal

Valor P

Trad

%

Mod

%

Trad

%

Mod

%

Barbecho

276

69

125

31

140

35

261

65

  92,379

0

Siembra

282

70

119

30

129

32

272

68

116,826

0

Abonamiento

274

68

127

32

137

34

264

66

  93,669

0

Control fitosanitario

268

67

133

33

148

37

253

63

  71,921

0

Cosecha

290

72

111

28

141

35

260

65

111,351

0

Selección

265

66

136

34

145

36

256

64

  71,857

0

Almacenamiento

298

74

103

26

150

37

251

63

110,769

0

Trad = Tradicional, Mod = Moderno; GL = 1; 2teo = 3,841

 

 

Cambios en los patrones culturales

Los patrones culturales de las familias campesinas del valle del Mantaro se expresan en el consumo de alimentos, las prendas de vestir, la forma de trabajo familiar, el tratamiento de las enfermedades, el tipo de fertilizantes en los cultivos, los materiales en las construcciones de las viviendas y el sistema de transporte.

En la tabla 13 se constata que, en 1975, el 61% de las familias campesinas se alimentaban con productos agrícolas de origen campesino. Este porcentaje disminuye al 40% en 2015. El consumo de alimentos industrializados aumentó de 9% a 29%. Las diferencias de porcentajes entre los períodos estudiados son estadísticamente significativas.

 

 

Tabla 13

Consumo de alimentos de las familias campesinas en 1975 y en 2015

 

Consumo de alimentos

1975

2015

Familias

%

Familias

%

Alimentos de origen campesino

245

61

159

40

Alimentos de origen industrial

  36

  9

118

29

Ambos

120

30

124

31

2cal = 62,035; GL = 2; 2teo = 5,991; Valor P = 0

 

En la tabla 14 se observa que el vestido de las familias campesinas ha sufrido cambios, pues el uso de prendas de vestir de origen artesanal, de 59% en 1975 decreció a 29% en 2015; mientras que el uso de las prendas de origen industrial aumentó de 31% a 49%. Las diferencias de porcentajes entre los períodos estudiados son estadísticamente significativas.

 

 

Tabla 14

Tipo de prendas vestir de las familias campesinas en 1975 y en 2015

 

Tipos de prendas de vestir

1975

2015

Familias

%

Familias

%

Prendas de vestir de origen artesanal

238

59

115

29

Prendas de vestir de origen industrial

125

31

197

49

Ambas

  38

10

  89

22

2cal = 79,438; GL = 2; 2teo = 5,999; Valor P = 0

 

En la tabla 15 se aprecia que, en 1975, la forma de trabajo de las familias campesinas era familiar (69%), mientras que, en 2015, esta ha disminuido a 39%, incrementándose el trabajo asalariado de 21% a 53%. Las diferencias de porcentajes entre los períodos estudiados son estadísticamente significativas.

 

 

 

 

 

 

Tabla 15

Forma de trabajo de las familias campesinas en 1975 y en 2015

 

Forma de trabajo

1975

2015

Familias

%

Familias

%

Trabajo familiar

276

69

157

39

Trabajo asalariado

  85

21

213

53

Ambos

  40

10

  31

  8

2cal = 88,825; GL = 2; 2teo = 5,991; Valor P = 0

 

En la tabla 16 se aprecia que, en 1975, el tratamiento de las enfermedades de las familias campesinas era predominantemente con medicina tradicional (85%), en tanto que, en 2015, a pesar de que la mayoría de las familias sigue utilizando la medicina tradicional, esta se ha reducido a 55%. El tratamiento con productos químicos ha aumentado de 12 a 25%. Las diferencias de porcentajes entre los períodos estudiados son estadísticamente significativas.

 

Tabla 16

Tratamiento de enfermedades de las familias campesinas

en 1975 y en 2015

 

Tratamiento

1975

2015

Familias

%

Familias

%

Medicina tradicional

341

85

221

55

Productos químicos

  50

12

  99

25

Mixto

  10

  3

  81

20

2cal = 97,132; GL = 2; 2teo = 5,991; Valor P = 0

 

En la tabla 17 se aprecia que, en 1975, los fertilizantes que utilizaban las familias campesinas en sus cultivos eran predominantemente abonos orgánicos (51%), en tanto que, en 2015, su uso disminuyó a 16%, y el empleo de abonos químicos se incrementó de 36% a 51%. Las diferencias de porcentajes entre los períodos estudiados son estadísticamente significativas.

 

 

Tabla 17

Tipo de fertilizantes utilizados en los cultivos de las familias

campesinas en 1975 y en 2015

 

Tipo de fertilizantes

1975

2015

Familias

%

Familias

%

Abonos orgánicos

205

51

  64

16

Abonos químicos

146

36

204

51

Ambos

  50

13

133

33

2cal = 121,163; GL = 2; 2teo = 5,991; Valor P = 0

 

 

En la tabla 18 se observa que, en 1975, las familias campesinas construían sus viviendas con materiales de la localidad (58%), mientras que, en 2015, esta proporción se redujo a 29%, y las viviendas con materiales de origen industrial aumentaron de 20% a 50%. Las diferencias de porcentajes entre los períodos estudiados son estadísticamente significativas.

 

Tabla 18

Tipo de materiales utilizados en la construcción de viviendas de las familias

campesinas en 1975 y en 2015

 

Tipo de materiales

1975

2015

Familias

%

Familias

%

Materiales de la localidad

231

58

118

29

Materiales de origen industrial

  80

20

200

50

Ambos

  90

22

  83

21

2cal = 132, 625; GL = 2; 2teo = 5,991; Valor P = 0

 

 

En la tabla 19 se observa que el sistema de transporte de las familias campesinas ha sufrido cambios, ya que el transporte con energía animal en 40 años disminuyó de 69% a 29%; en tanto que el transporte con energía motorizada aumentó de 20% a 41%. Las diferencias de porcentaje entre los períodos estudiados son estadísticamente significativas.

 

Tabla 19

Sistema de transporte de las familias campesinas en 1975 y en 2015

 

Sistema de transporte

1975

2015

Familias

%

Familias

%

Energía animal

278

69

116

29

Energía motorizada

  80

20

164

41

Ambas

  43

11

121

30

2cal = 88,299; GL = 2; 2teo = 5,991; Valor P = 0

 

 

Discusión

Al comparar los antecedentes citados con los resultados empíricos de la investigación, se evidencian cambios significativos en las características socioeconómicas de las familias campesinas, en el acceso y uso de las tecnologías agrícolas y pecuarias, cambios en la estructura de los cultivos y cambios en los patrones culturales. Al respecto, los trabajos de Figueroa y Cotlear corroboran que la tecnología moderna, evidenciada en el uso de fertilizantes químicos, variedades híbridas, pesticidas, la mecanización, la introducción de razas de animales mejorados genéticamente de alto rendimiento en fibra y carne de ovinos y vacunos de producción de leche, viene repercutiendo en las condiciones socioeconómicas y culturales de las familias rurales del valle del Mantaro.

El Centro Internacional de la Papa (CIP, 1984), con las estrategias de mejoramiento para la producción de semilla sexual de papa, aportó con la masificación de variedades de la producción de papa en la región de la sierra central y, en particular, el valle del Mantaro ha sido escenario de cambios sustanciales en la tecnología agropecuaria. Estos cambios consisten en la adopción, en los últimos 40 años, de un conjunto de técnicas modernas tales como el uso de fertilizantes químicos, el control químico de plagas, enfermedades de los cultivos y de animales, la mecanización y la difusión de variedades híbridas de cultivos. Como resultado, algunos sectores del agro regional han logrado implementar sus niveles de productividad y capitalización e intensificar la actividad agrícola en forma notoria. Se demuestra que los cambios técnicos generan diferenciación socioeconómica y cultural entre los campesinos, individualiza a las familias, acelera la lucha por la producción y ocasiona sobreoferta en el mercado por falta de una producción planificada.

La penetración y la implementación de procedimientos tecnológicos agrícolas y pecuarios en el contexto del valle del Mantaro han reforzado la dependencia de la producción y reproducción del campesino del mercado, ha profundizado la diferenciación socioeconómica y cultural de las familias campesinas.

La profundización de la diferenciación campesina en las comunidades ha generado la formación de una capa de campesinos pudientes o acomodados, vinculados a una agricultura comercial de monocultivo, así como la formación de una capa de campesinos pobres, articulados a la agricultura y ganadería de autosubsistencia; hecho que está relacionado con la penetración de tecnologías modernas capitalistas en las comunidades.

El cambio tecnológico modifica las condiciones socioeconómicas de las familias campesinas del valle del Mantaro en el nivel educativo, acceso laboral, ingresos económicos, extensión de tierras cultivadas, rendimiento de cultivos, crianza de ganado vacuno y ovino, destino de la producción agrícola, tratamiento de enfermedades, dimensiones de la crianza, capacitación en tecnologías productivas, tipo de tecnología productiva, infraestructura productiva, acceso al crédito, mejoramiento genético pecuario, mejoramiento genético de semillas, labores culturales de la agricultura, tipo de agricultura y tipo de crianza de animales.

Las condiciones socioeconómicas y culturales de las familias campesinas en el contexto del valle del Mantaro están relacionadas a los mercados de producción y de servicios, la dependencia de las herramientas agrícolas y pecuarias, así como a los productos veterinarios de origen industrial. Antes de la penetración de la asistencia técnica privada y estatal y la mercantilización de la economía campesina, los instrumentos agrícolas ya eran adquiridos en el mercado, pero en pequeñas cantidades y solo a nivel de herramientas manuales, cayendo el peso de la labor productiva sobre la fuerza de trabajo familiar del campesino; posteriormente, al mercantilizarse la economía agrícola, con fines de elevar los niveles de producción y productividad para satisfacer las demandas del mercado, se inicia por parte de una capa de campesinos pudientes, así como por la comunidad como colectividad institucional, la sustitución de las herramientas manuales por maquinarias agrícolas, como el tractor, las máquinas trilladoras, fumigadoras, mochilas para el control fitosanitario.  En suma, se observa, en la mayoría de las familias campesinas, una dependencia casi absoluta del mercado de instrumentos agrícolas de producción.

En cuanto a los insumos agrícolas, hay una dependencia muy marcada de la economía campesina respecto de los insumos empleados en la producción agrícola y ganadera. En lo que se refiere a los fertilizantes, las familias campesinas han abandonado el uso predominante de abonos naturales, como el estiércol de animales y la ceniza, para sustituirlos por fertilizantes químicos, como los abonos nitrogenados, potasio y cloruro de potasio, simple y compuesto (NPK). La dependencia de la productividad del suelo agrícola a los fertilizantes químicos ha determinado la dependencia de la agricultura campesina a las fluctuaciones del mercado de fertilizantes y de los precios.

En relación a los productos de sanidad animal, los campesinos dependen del mercado de productos veterinarios, como vacunas, antibióticos, sales minerales, vitaminas y calcio, para el tratamiento de las enfermedades infecciosas y carenciales, control de parásitos internos y externos; del mismo modo, para la compra de ganado mejorado de alto rendimiento en producción de leche, carne y fibra. Estos aspectos y características son indicadores y factores del cambio en las condiciones socioeconómicas y patrones culturales.

En relación a la producción campesina, el paulatino proceso de transformación de la economía campesina de autosubsistencia en mercantil, al haberse implementado la agricultura comercial con el monocultivo de papa, maíz, cebada y trigo, ha originado que, para realizar y garantizar su reproducción, dependa de la demanda de productos agrícolas del mercado.

La significación de las diferencias de las condiciones socioeconómicas de las familias entre 1975 y 2015 se evaluó con la prueba de chi cuadrado para homogeneidad de muestras, al 95% de confianza estadística.

 

Cambios socioeconómicos

En la tabla 2 se observa que el acceso laboral de las familias campesinas en 1975 era solo de un 45%, mientras que en 2015 fue de 72%. La prueba de chi cuadrado revela diferencias estadísticamente significativas entre los porcentajes de los períodos comparados. Ese resultado evidenció, por tanto, un incremento significativo en el acceso laboral después de las capacitaciones en tecnologías productivas.

 

Cambios en la crianza de animales

En 1975, la mayoría de las familias campesinas criaban animales mayores (vacuno, ovino, porcino y equino) y menores (aves y cuyes), tanto criollos como mejorados. En la actualidad, se observa una ligera disminución de crianza de animales criollos (con excepción de porcinos y equinos), en cuanto ha aumentado la de animales mejorados. La prueba de chi cuadrado mostró diferencias significativas de porcentajes entre los períodos estudiados en lo que se refiere a crianza de ganado vacuno y ovino de las familias campesinas del valle del Mantaro. No se encontraron diferencias en el destino de la producción pecuaria de los años 1975 y 2015. La mayoría de la producción se destinaba a la venta local y regional.

 

Cambios en los cultivos

En 1975, la mayoría de las familias realizaba labores culturales como el barbecho, la siembra, el sistema de abonamiento, el control fitosanitario, la cosecha, la selección y el almacenamiento, utilizando conocimientos tradicionales transmitidos de padres a hijos. En 2015, todas esas actividades han pasado a utilizar herramientas tecnológicas (p. ej. tractor, productos agroquímicos para el control fitosanitario). Las diferencias de porcentajes entre los períodos analizados son estadísticamente significativas.

 

Cambios en los patrones culturales

Los patrones culturales de las familias campesinas del valle del Mantaro se expresan en el consumo de alimentos, las prendas de vestir, la forma de trabajo familiar, el tratamiento de las enfermedades, el tipo de fertilizantes utilizados en los cultivos, los materiales en las construcciones de las viviendas y el sistema de transporte.

El vestido de las familias campesinas ha sufrido cambios, pues el uso de prendas de vestir de origen artesanal, de 59% en 1975, decreció a 29% en 2015; mientras que el uso de las prendas de origen industrial aumentó de 31% a 49%. Las diferencias de porcentajes entre los períodos estudiados son estadísticamente significativas.

La forma de trabajo de las familias campesinas, en 1975, era familiar (69%), mientras que, en 2015, disminuyó a 39%, incrementándose el trabajo asalariado de 21% a 53%. Las diferencias de porcentajes entre los períodos estudiados son estadísticamente significativas.

En 1975, los fertilizantes que utilizaban las familias campesinas en sus cultivos eran predominantemente abonos orgánicos (51%), en tanto que, en 2015, su uso disminuyó a 16 %, y el empleo de abonos químicos se incrementó de 36% a 51%. Las diferencias de porcentaje entre los períodos estudiados son estadísticamente significativas.

En 1975, las familias campesinas construían sus viviendas con materiales de la localidad (58%), mientras que, en 2015, esta proporción se redujo a 29%, y las viviendas con materiales de origen industrial aumentaron de 20% a 50%. Las diferencias de porcentajes entre los períodos estudiados son estadísticamente significativas.

El sistema de transporte de las familias campesinas ha sufrido cambios, ya que, en 40 años, el transporte con energía animal disminuyó de 69% a 29%; en tanto que el transporte con energía motorizada aumentó de 20% a 41%. Las diferencias de porcentajes entre los períodos estudiados son estadísticamente significativas.

 

Conclusiones

La diferenciación socioeconómica y cultural está en relación a la innovación tecnológica, mayor rendimiento de la actividad agrícola, a la innovación tecnológica en las crianzas, desigualdad en la extensión y calidad de tierras agrícolas y pasturas, la desigualdad de ingresos económicas provenientes de las actividades agropecuarias, y la profundización por la integración de la economía campesina a las necesidades del mercado. En todas las comunidades estudiadas hay una concentración de tierras y de ganado en poder de una capa de campesinos pudientes que producen para el mercado y, por otro lado, una tendencia a la formación de otras capas de campesinos medios y pobres con escasa cantidad de tierras y cabezas de ganado o sin ellas.

El cambio tecnológico modifica los patrones culturales de las familias campesinas del valle del Mantaro; las actividades socioeconómicas basadas en patrones culturales locales fueron sustituidas paulatinamente por patrones culturales modernos, tanto en las labores de crianza como en la modificación de los ciclos ganaderos y de los ciclos agrícolas. De este modo, se nota la ruptura de los valores tradicionales como efecto de la sustitución por los valores exógenos, así como el cambio de los hábitos de alimentación, vestimenta, salud y vivienda de las familias campesinas en el valle del Mantaro.

 

Referencias bibliográficas

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[1] Sociólogo, Magister en Desarrollo Rural, docente, Universidad Nacional del Centro del Perú, Facultad de Sociología, ftello@uncp.edu.pe https://orcid.org/0000-0001-9506-8451 

[2] Estadístico, Licenciado en Estadística, docente, Universidad Nacional del Centro del Perú, Facultad de sociología, mrafaele@uncp.edu.pe https://orcid.org/0000-0001-5728-011X